Mi historia

Licenciada en Ciencias Políticas, toda mi carrera profesional ha estado ligada al mundo de la banca y los seguros. Sin embargo, desde hace un tiempo he sentido la llamada para aportar algo más. Cuando en un momento de cambio profundo en mi vida el Tarot se empeño en quedarse conmigo, supe que ya no podía negarme. Mi primera baraja fue un regalo inesperado, que se guardó de cajón en cajon, y de mudanza en mudanza - pandemia mediante - hasta que decidio salir para no volver a entrar. De forma amateur he ido aprendiendo, con cursos y lecturas, poco a poco, observando, haciendo lecturas a otros, y analizando las cartas hasta encontrarles el sentido. Es una tarea apasionante, que no siempre es inmediata o absoluta, sino que tiene matices y a veces requiere su tiempo, pero siempre resulta un aprendizaje inolvidable. Por eso el tarot que me gusta practicar es un tarot slow, con calma, donde no influyan las prisas o las ansiedades del mundo moderno, sino que con todo el respecto que se merece este arte de siglos, conectar con el verdadero mensaje o sugerencia que éstas nos quieren trasmitir. Como decía, he sentido desde siempre  la necesidad profunda de ayudar a los demás y creo haber hallado en el Tarot una forma honesta de trasmitir respuestas y orientar entre las nieblas a aquellos que puedan necesitarlo.  Mi experiencia personal, llena de vivencias, me ha aportado la madurez y la empatía necesarias para aportar con respecto y honestidad las respuestas que pueda hallar en el Tarot con el único y último fin de ser útil y ayudar a quién desee una lectura conmigo.